Falsos hábitos que crees saludables pero ralentizan tu metabolismo
Como te habrás dado cuenta, algunas personas, aunque coman en exceso, ¡apenas engordan!
En cambio, otras personas, aunque se esfuercen y controlen su alimentación, no consiguen mantener su peso ideal y saludable.
En este artículo, veremos cinco de los hábitos que ralentizan el metabolismo.
Metabolismo: un breve recordatorio
A modo de recordatorio, el término metabolismo engloba todos los procesos químicos que tienen lugar en nuestro cuerpo para mantenernos vivos y garantizar que nuestro organismo funcione correctamente.
Cuando las personas describen su metabolismo como rápido o lento, generalmente se refieren a la eficacia con la que el cuerpo puede convertir las calorías obtenidas de los alimentos en reservas de energía.
Según los especialistas, no es sólo la genética la causa del aumento de peso. Los hábitos diarios también influyen directamente en el metabolismo. Y aunque la genética desempeña un papel importante en la determinación de la tasa metabólica, llevar un estilo de vida sutil, tanto en lo que se refiere a la dieta como al ejercicio, influye enormemente en la capacidad del organismo para digerir los alimentos y mantener un peso saludable.
Por lo tanto, si pensabas que llevabas una dieta sana y sigues sintiéndote cansado, tienes problemas para dormir o no consigues mantener un peso saludable, es probable que el problema resida en hábitos que ralentizan tu metabolismo y que crees erróneamente que son saludables.
Así que empieza por revisar estos hábitos antes de buscar otra causa que esté saboteando tus esfuerzos por perder peso.
Desayunar con alto contenido en azúcar
La granola, esa mezcla de avena, almendras y miel, puede percibirse como un desayuno saludable, pero no siempre es así.
Muchas granolas del mercado no son realmente sanas, aunque sus etiquetas indiquen que están hechas con miel y no contienen azúcar rápido. Sin embargo, esta miel ha sido pasteurizada y, por lo tanto, no es mejor que el jarabe de alta fructosa.
La solución a este tipo de hábitos que ralentizan el metabolismo es preparar en casa tu propia granola germinada.
Puedes aprovechar el fin de semana para preparar las provisiones de la semana. Remoja algunas almendras crudas, anacardos y semillas de chía en agua durante toda la noche. Después sécalas con una toalla de papel. Mézclalas con miel cruda, copos de coco y canela, y ásalas en el horno.
Y ya lo tienes, un delicioso desayuno que impulsará tu metabolismo de forma natural.
No dormir lo suficiente
El metabolismo no depende sólo de la comida. La cantidad y la calidad del sueño pueden influir considerablemente en el peso.
Dormir poco hace que el cuerpo conserve sus reservas. Como resultado, gastará menos energía en funciones bioquímicas que considera menos prioritarias.
Esto ralentiza automáticamente el metabolismo.
La solución es dormir lo suficiente, tanto en duración como en calidad. Eliminar algunos hábitos puede ayudarte a aprovechar al máximo el sueño nocturno y permitir que tu cuerpo funcione correctamente y queme calorías con normalidad.
Comer demasiados cereales integrales
Los cereales integrales son una gran fuente de fibra y nutrientes esenciales, pero no todos los cereales son fáciles de digerir.
Los cereales integrales no son necesariamente malos si los comes sin gluten y con moderación.
El problema de los cereales con gluten es que suelen ser difíciles de digerir, incluso para los no celíacos.
Millones de personas en todo el mundo padecen sensibilidad al gluten no celíaca (SGNC). La intolerancia al gluten o enfermedad celíaca es una de las enfermedades digestivas más comunes en la actualidad. Generalmente se manifiesta a través de síntomas como problemas intestinales, dolor abdominal, hinchazón, diarrea y estreñimiento. Estos síntomas aparecen tras consumir gluten y desaparecen en cuanto se elimina de la dieta.
La intolerancia al gluten es el resultado de los métodos agrícolas modernos, que producen alimentos modificados genéticamente y altamente procesados.
Como consecuencia, el cuerpo humano tiene dificultades para tolerar y metabolizar esta nueva forma de alimento.
Por lo tanto, se recomienda moderar su consumo.
Limítese al ejercicio cardiovascular
Muchas personas, en su afán por mantenerse en forma o perder peso, entrenan con regularidad. Sin embargo, limitarse a un solo ejercicio es un error de entrenamiento que debe evitarse a toda costa.
El entrenamiento cardiovascular, en particular, puede ralentizar el metabolismo en lugar de acelerarlo.
El objetivo de todo ejercicio es conservar y reforzar la masa muscular para quemar grasas de forma natural.
Pero no todos los ejercicios tienen el mismo efecto sobre el organismo.
En lugar de limitarse únicamente al ejercicio cardiovascular, es mejor alternar practicando HIIT. Estos ejercicios cortos de alta intensidad han sido descritos por la ciencia como la forma más eficaz de quemar grasa.
Otra ventaja que se atribuye a este tipo de ejercicios es su efecto post-entrenamiento. En otras palabras, su efecto perdura incluso después de haber terminado la sesión de entrenamiento.
Bebe sólo zumos de frutas
Cuando estás intentando perder peso, la hidratación es una obligación y una condición necesaria para que tu cuerpo funcione correctamente.
Sin embargo, necesitas hidratarte utilizando la bebida adecuada.
El problema de los zumos de fruta es que están compuestos básicamente de azúcar líquido. Y como debes saber, el exceso de azúcar ralentiza el metabolismo al producir un pico en los niveles de azúcar en sangre.
Los zumos comerciales son peores. Su proceso de fabricación y pasteurización elimina todos los beneficios del zumo natural. Su alto contenido en azúcar y aditivos empeora las cosas.
La solución ideal es comer fruta entera en su estado natural. Su valor nutritivo es mayor que el de los zumos.
Estos son sólo algunos de los hábitos que se consideran saludables pero que en realidad ralentizan tu metabolismo y te impiden perder peso.
