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El balón gástrico es un método no quirúrgico para facilitar la pérdida de peso.
Consiste en introducir un balón en el estómago para inducir saciedad y permitir que las personas con dificultades para adelgazar reciban apoyo en su proceso de adelgazamiento.
Se dice que el balón gástrico puede ayudar a perder el mismo peso en 6 meses que tras 2 años de esfuerzo…
Así que tenemos curiosidad por saber más sobre esta ayuda para adelgazar, sus ventajas e inconvenientes.
El balón gástrico es un pequeño globo fabricado con un material a base de elastómero de silicona, flexible y maleable. Una vez en el estómago, se rellena con una solución salina o aire y flota libremente. Al ocupar cierto volumen en el espacio donde se ingieren los alimentos, el balón gástrico ralentiza la digestión y proporciona una sensación de plenitud y saciedad gástrica.
Existen diferentes tipos de balón gástrico. Algunos son ingeribles, mientras que otros están conectados a un tubo que permite introducirlos vacíos en el estómago y luego inflarlos, utilizando un fibroscopio. Un balón gástrico puede estar insertado entre 3 meses y 1 año, dependiendo de las necesidades del paciente y del peso que se quiera perder.
A continuación te presentamos un resumen de los diferentes balones gástricos disponibles.
Este balón gástrico se ingiere bajo control radiográfico, sin anestesia ni fibroscopia. Si la sensación de saciedad resulta insuficiente, puede colocarse un segundo balón al cabo de 1 mes, o incluso un tercer balón si es necesario. El balón se retira a los 3 meses mediante fibroscopia.
Existen varios modelos de este tipo de balón. Algunos están formados por una envoltura de silicona rellena de una solución salina estéril; otros están formados por una bolsa de polímero que se infla con aire; por último, algunos balones gástricos están formados por una envoltura de poliuretano, también rellena de una solución salina.
Este tipo de balón es ajustable mediante un tubo. De este modo, el volumen del balón puede reducirse al principio, sobre todo en caso de mala tolerancia, o aumentarse al cabo de 6 meses si la pérdida de peso se estanca. Se rellena con una solución salina estéril o con aire.
El balón gástrico es considerado por los profesionales como una ayuda eficaz cuando es imposible seguir una dieta durante más de 2 meses, o cuando el peso perdido se recupera en cuanto se interrumpe la dieta. Ayuda a eliminar el efecto yo-yo y facilita el seguimiento regular de un programa global de adelgazamiento, gracias a la sensación de saciedad que proporciona. Es importante destacar que el balón gástrico no es una solución milagrosa para perder el exceso de peso, sino una herramienta de apoyo que debe combinarse con una dieta equilibrada y una actividad física regular para que dé sus frutos. Además, toda intervención con balón gástrico va acompañada de una evaluación y seguimiento por parte de un equipo multidisciplinar para asegurar que el paciente está motivado, es capaz de seguir una dieta equilibrada y modificar su estilo de vida.
El balón gástrico se considera una buena indicación para las personas que tienen entre 10 y 25 kg que perder.
Sin embargo, existen una serie de contraindicaciones:
Aunque el balón gástrico no requiere cirugía, no es un procedimiento trivial. Para que el balón gástrico contribuya realmente al éxito de un programa global de adelgazamiento, es necesario un enfoque multidisciplinar.
Es el médico especialista que colocará el balón. La posibilidad de colocar un balón gástrico, sus indicaciones y contraindicaciones también se comentan con él previamente. Es él quien podrá confirmar si, desde un punto de vista fisiológico, puedes beneficiarte de un balón gástrico. El gastroenterólogo le controlará estrechamente durante los días posteriores a la colocación del balón, y cada 2 meses mientras el balón permanezca en su estómago. El objetivo de este seguimiento es asegurarse de que el balón funciona correctamente, de que no hay efectos secundarios indeseables y, si es necesario, realizar los ajustes de tamaño necesarios para mantener la sensación de saciedad y las posibilidades de éxito del programa. También retirará el balón al final del programa.
Profesional de la nutrición y la pérdida de peso, el nutricionista le ayudará a comprender los fundamentos de una alimentación equilibrada y a aplicarlos a su vida cotidiana. Le ayudará a elegir los alimentos adecuados, preservando el placer de sus comidas. Una vez insertado el balón gástrico, un nutricionista le hará un seguimiento a razón de 1 cita al mes, o más si es necesario. Se le pueden ofrecer clases de cocina para ayudarle a preparar comidas sanas y a gestionar su dieta en su vida diaria. El seguimiento continúa durante 1 año después de la retirada del balón.
Se trata de un profesional que se ocupa de los aspectos psicológicos y conductuales del proceso de adelgazamiento. Está ahí para escuchar y trabajar sobre las causas subyacentes del sobrepeso. También puede ayudar a modificar los trastornos alimentarios y ofrecer grupos de discusión para mejorar las posibilidades de éxito a largo plazo.
Antes de colocar el balón gástrico, el paciente es tratado por un equipo multidisciplinar (del que ya hemos hablado en nuestra sección anterior).
Durante – Colocación del balón gástrico – duración aproximada: 20 minutos
Después de
En el siguiente vídeo se explica claramente la técnica de inserción del balón gástrico:
Una vez transcurrido el tiempo previsto, se retira el balón porque el estómago se ha adaptado, haciéndolo ineficaz. La retirada del balón se realiza bajo anestesia general, intubación y control endoscópico, y dura unos 15 minutos. No es necesaria ninguna intervención quirúrgica.
El balón gástrico suele ser muy bien tolerado. De hecho, el estómago se adapta a su presencia en pocos días. Se produce un aumento de la secreción ácida y contracciones del estómago sobre el balón, lo cual es completamente normal.
Sin embargo, los siguientes efectos secundarios son frecuentes en los 3 días siguientes a la operación:
Generalmente se recetan medicamentos para aliviar las molestias, que son sólo temporales.
Las cifras muestran que sólo entre el 1 y el 3% de las personas sufren intolerancia al balón, que se retira. Otras complicaciones, aunque raras, son posibles. Se trata de casos de esofagitis, gastritis, úlceras, pancreatitis o perforación (estas 2 últimas son extremadamente raras).
Por último, en algunos pacientes, la sensación de saciedad desaparece al cabo de pocas semanas, lo que obliga a ajustar el balón.
En combinación con una dieta equilibrada, ejercicio regular y un cambio profundo en el estilo de vida, el balón gástrico permite, en la gran mayoría de los casos, perder peso con éxito.
Sin embargo, la pérdida de peso depende de una serie de factores, como el seguimiento del programa y la motivación. Perder peso y mantenerlo depende de cómo se adopten los cambios a largo plazo.
Después de 6 meses con el balón gástrico en el estómago, puedes esperar perder entre 10 y 25 kg. Todo depende de cuántos kilos quieras perder, de tu metabolismo y de cuánto te esfuerces.