Menos estrés para mejores erecciones
La disfunción eréctil (o mala erección) es un problema muy común entre los hombres. Consiste en la incapacidad de mantener una erección firme.
Los factores que pueden causar este problema son de dos tipos: físicos y psicológicos.
Para evitar estos problemas, especialmente a partir de los 50 años, todo hombre debería consultar a un médico al menos una vez al año.
Disfunción sexual: Causas psicológicas
El deseo sexual es un mecanismo complejo que tiene lugar ante todo en el cerebro, que interviene en todas las fases del comportamiento sexual. Éste puede influir directamente en el deseo del hombre, estimulándolo o bloqueándolo. De hecho, una depresión grave puede afectar al deseo sexual, provocando una disfunción eréctil.
Por desgracia para los hombres deprimidos, incluso los tratamientos antidepresivos pueden provocar a veces disfunción eréctil. La complejidad bioquímica de los mecanismos que conducen a una erección la hace muy susceptible a la interferencia de fármacos. En cuanto a los fármacos ansiolíticos (benzodiacepinas), a menudo recetados al inicio de la depresión, suelen provocar un descenso de la libido (deseo sexual), sobre todo cuando se toman en dosis más altas o de forma regular.
Muchos de los productos que consumes podrían afectar a tu rendimiento bajo el edredón e impedirte una erección adecuada. La lista de pastillas que provocan disfunción eréctil es larga e incluye ciertos fármacos normalmente recetados para la hipertensión, analgésicos y antidepresivos. Las drogas ilegales como las anfetaminas, la cocaína y la marihuana también pueden causar graves problemas a los hombres, además de los relacionados específicamente con el sexo.
Un trabajo estresante y una vida dura pueden causar muchos problemas de salud, incluida la disfunción eréctil. Según estudios recientes, los hombres que tienen una actitud “guerrera” ante el estrés tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, que a su vez provocan disfunción eréctil. La mejor manera de evitarlo es aprender a gestionar el estrés: hacer ejercicio con regularidad, dormir lo suficiente y reservar tiempo para actividades de ocio.
Disfunción sexual: causas físicas
Las causas de la disfunción eréctil también pueden ser físicas; muchas enfermedades que afectan a los nervios y músculos del pene y también a la tensión arterial provocan disfunción eréctil. Las causas más comunes son la diabetes, la hipertensión, la esclerosis múltiple y la cirugía de vejiga y próstata. Los trastornos hormonales como el hipogonadismo, que provoca un descenso de los niveles de testosterona, pueden afectar a la capacidad de tener buenas erecciones.
Aunque beber alcohol antes del sexo puede reducir la ansiedad y mejorar el acto sexual, es mejor no excederse. Demasiado alcohol puede comprometer toda la velada. Beber grandes cantidades de alcohol afecta a la erección, provocando una disfunción eréctil temporal.
Los hombres que sufren este tipo de problemas deben consultar a un urólogo. Una visita a un médico experimentado permitirá detectar la disfunción eréctil en una fase temprana. A menudo, un problema sexual indica la presencia de otras enfermedades. El especialista realizará un examen fisiológico completo y recomendará el tratamiento adecuado.
Pero la pregunta que mucha gente sigue haciéndose es: “¿Cuál es el mejor tratamiento disponible para conseguir erecciones fuertes?”. Hemos probado muchas pastillas para la disfunción eréctil para usted. Las que dan mejores resultados son generalmente tratamientos naturales sin efectos secundarios.
